El año pasado, el Instituto Nacional de la Mujer(INM) recibió varias misivas de otras tantas mujeres, quejándose de que las mujeres eran objeto de mucho exhibicionismo que ya rayaba en el choteo. Todo esto, se quejaban, era producto de mentes morbosas del género masculino, por lo que ya era bueno que se hiciera algo para detener esa tendencia a todas luces dañina para las mujeres.
Para empezar las acciones tendientes a ir disminuyendo ese mal hábito --tildado de vicio por nop pocas féminas-- debera exigirse a los impresores de los calendarios, mismos que ya han abusado en demasía de incluir puras mujeres semidesnudas.
Al entererse de esta acción, los impresores quisieron contrarestarla, pero fue demasiado tarde, cuendo voltearon la cara ya tenían encima la orden judicial de suspender esa práctica, so pena, en caso de no acatarla, de recibir multas muy altas y hasta cárcel.
En esas condiciones, los impresores planearon producir los calendarios conteniendo las fotos que a continuación se muestran.
Las fotos de los meses: enero, febrero y agosto fueron eliminadas porque aran demasiado atrevidas y definitivamente se consideró que atentaban contra la moral pública, principalmente de los hombres.
Fue tal la reacción de todo el pueblo, que llevaron a provocar escándalos nunca vistos, marchas, bloques de calles y carreteras. En algunas ciudades de la República incluso incendiaron las oficinas del INM, lanzaron piedras e injurias a las funcionarias de dicho Instituto. En fin, fue tan fuerte, como se dijo, la reacción, que inmediatamente se expidió un decreto cancelando la orden que produjo este reclamo.
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